Mi aventura en Aprendo Contigo – PERÚ

Hace exactamente una semana que volví a España. Aún me acuerdo de los nervios que pasé la semana antes de marchar haciendo mi maleta, las típicas dudas de siempre:

Yo: me voy a llevar ropa de verano, hace calor en las fechas que voy, 

Yo: pero si viajo necesitaré ropa de abrigo en Cuzco hace frío.

Yo: no debe de ser para tanto…

(Pausa para buscar en Internet ”Tiempo en Cuzco”)

Yo: vale, no hará tantísimo frío… Pero si es posible que me pille la fecha de lluvias

Yo: vale pues, quitaré estos pantalones cortos y meteré unos largos

Yo: aaay… pero no puedo llevar solo dos pantalones cortos!!!

Típica discusión contigo misma/o sobre como meter TODO en una maleta de 21 kilos y una mochila de 30 litros de decathlon…

Recuerdo llegar al aeropuerto de Lima, después de 12 horas de avión, en las cuales cubrí el record mundial de persona que ha visto más películas en el menor tiempo posible (os recomiendo viajar con Iberia, tienen películas que ni estaban en cartelera!!!!). Recojo mi equipaje, me dirijo hacía la salida del aeropuerto y cojo un taxi. ESTOY EN LIMA! 

Y de repente, me doy cuenta de que ya estoy aquí!! De que el viaje que llevaba soñando durante meses acaba de comenzar!! Y cómo comenzó? Pues como todos los voluntarias/os que han ido a Lima sabréis, empezó con un atasco de hora y media del aeropuerto a mi residencia.

Lima es tan bella como caótica! Al principio impacta, te juegas la vida en cada paso de cebra y el sonido de cláxones de coches te satura, pero luego le coges el gustillo a vivir ”al límite” a cruzar por donde te da la gana,a subirse 6 personas en un taxi de 4, e incluso empiezas a disfrutar de la dulce melodía constante del claxon.

Lima también es una ciudad de contrastes, yo vivo en Jesús María, un distrito residencial de clase media. Un distrito tranquilo, seguro y bonito. Realizo mis prácticas en el Hospital del Niño, donde me relaciono con familias muy humildes y con muchísimas necesidades básicas sin cubrir. En otro extremo tenemos Miraflores, el distrito cosmopolita y turístico, con el atardecer más bonito del mundo. Barranco, el distrito bohemio, repleto de puro arte en todas sus calles. Y el cercado de Lima, con su colosal casco antiguo y su arquitectura tradicional.

He realizado mis prácticas en Aprendo Contigo. Aprendo Contigo es un programa educativo- recreativo dirigido a menores ingresados de larga estancia. Al principio estaba un poco asustada sobre cómo iba a ser trabajar en un hospital, y sobre todo como yo iba a responder a todas las situaciones que debía encarar. Nada más lejos, todas y cada una de las personas de Aprendo Contigo te apoyan y te acompañan durante toda tu estancia. Poder intervenir en sus sesiones, con los y las menores y sus familias ha sido una experiencia única. 

Ya he acabado mis 3 meses de prácticas y han pasado volando! Si os soy sincera, no he parado desde que pisé Perú. Me he pasado las mañanas dándolo todo en mis prácticas y recorriendo el país en mi tiempo libre. He conocido gente maravillosa, lugares increíbles, absorbiendo todas las cosas bonitas que he escuchado, que he sentido y me han transmitido, para que ahora, a mi vuelta, pueda contagiaros a cada una de vosotras y vosotros la alegría y la felicidad que yo he vivo cada día en Lima.

Os recomiendo que superéis vuestras dudas y miedos, y os lancéis a la aventura que desde la OCDS nos proponen. Realizar mis prácticas finales en Aprendo Contigo y en un país como Perú ha sido la mejor manera de poner punto y final a mi grado de Educación Social. Es una experiencia que te cambia tanto personal como profesionalmente, te hace pensar, reflexionar, valorar lo que tienes y lo que no tienes. Trabajar con Aprendo Contigo ha sido una aventura preciosa, y sinceramente los conocimientos que yo he podido aportar nunca se acercarán a los que me traigo conmigo a nuestra isla. Me llevo parte de cada uno de mis compañeros y compañeras de prácticas,  de las familias, de las madres y padres, el equipo médico, pero sobretodo de los pequeños y pequeñas con las que trabajaba. Esos enanos y enanas han hecho que mi experiencia haya sido como ha sido, especial e inolvidable. Cada una de ellas y ellos me ha hecho reflexionar, cuestionarme a mí misma, me han hecho reír, llorar, sacarme de mis casillas,… Cada uno de ellos tiene una parte de mi corazoncito. De hecho creo que se lo han quedado entero, así que… tendré que volver a Perú a recuperarlo!! 😛 <3

ÁNGELA C.


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